Cocinar para los pequeños

Cocinar para niños pequeños y niños en crecimiento presenta algunos desafíos únicos en el camino.Si bien desea proporcionarles aquellos nutrientes muy importantes, a menudo es difícil hacer que coman esos alimentos que son mejores para sus cuerpos en crecimiento.

Probablemente todos somos conscientes de la pirámide alimentaria y la cantidad de porciones que nuestros hijos necesitan de granos saludables, proteínas, frutas, verduras y productos de calcio.Desafortunadamente, hacer que coman estos productos nutritivos es otra cuestión, desafortunadamente.

La buena noticia al cocinar para niños es que no necesariamente necesita incorporar todos los nutrientes importantes en los alimentos para la cena.

La verdad del asunto es que los pepinos crudos, que están en rodajas finas y rociadas con sal, hacen un bocadillo mucho más saludable que las papas fritas y muchos pequeños aman esto para un refrigerio. Obtienes un vegetal en su sistema y están recibiendo una golosina a la hora de la merienda.

Lo mismo es cierto para el melón y los melones.Estos son excelentes bocadillos y son una fruta muy necesaria en estas dietas importantes para las más pequeñas.

Cuando se trata de cocinar para los pequeños, sin embargo, el hombre, la mujer y el niño no pueden vivir solo con macarrones con queso.Ha sido probado y probado y fallado miserablemente.Intente mezclar las cosas siempre que pueda mientras mantiene las comidas amigables para los niños.

Es importante que intente introducir granos integrales, proteínas y verduras siempre que sea posible en las comidas alrededor de su hogar. La buena noticia es que hay muchos alimentos de conveniencia preempaquetados que introducen granos integrales como nunca antes para satisfacer la creciente demanda de los consumidores para comidas más saludables que se pueden preparar con poca tarifa o alboroto.

Cocinar comidas más saludables para niños ahora es más fácil que nunca.Las frutas y verduras frescas son las mejores siempre que sea posible. Sin embargo, si no puede manejar fresco, debe evitar enlatadas (frutas, especialmente porque a menudo nadan en dulzura azucarada) siempre que sea posible. Frozen es muy preferible a enlatarse cuando se trata de frutas y verduras, ya que a menudo hay menos aditivos.

Si necesita algunas ideas de comidas geniales que sean amigables para los niños y fáciles de presupuesto, a menudo puede encontrar recetas fácilmente disponibles en línea.

Puede satisfacer las necesidades de productos de calcio y lácteos de su hijo agregando leche como la bebida de elección para las comidas o una porción de queso derretido sobre su vegetal favorito. El helado, el yogurt y el budín también son excelentes golosinas ricas en calcio, con moderación, por supuesto.

Anime a sus hijos a probar cosas nuevas en lugar de cocinar las mismas comidas una y otra vez que saben que es probable que coman. Esto evita que ocurran dos cosas.En primer lugar, te ayuda a no aburrirse al cocinar para tus hijos.

En segundo lugar, permite a sus hijos probar nuevos sabores y texturas y formar opiniones sobre ellos. Al probar cosas nuevas, aprenderán no solo sobre las cosas que no les gustan sino también sobre los alimentos que realmente disfrutan.

También debe tener en cuenta que sus hijos también son personas al cocinar para ellos.Así como tienes alimentos que te gustan y no te gustan, también desarrollarán gustos con el tiempo.Esos gustos también pueden cambiar en el tiempo.

Es frustrante, lo sé, gastar tiempo y dinero preparando una comida solo para que su hijo aleje el plato y se niegue a probar la comida.Para esto, recomiendo solicitar su ayuda en la cocina. Es mucho más probable que los niños coman las cosas que tenían una mano para prepararse en cuestión de logro y orgullo. Es una guerra psicológica, lo sé, pero todo es justo en la guerra y la hora de la cena.

Quizás el mayor regalo que puede darse (mucho mayor que la ayuda en la cocina) ‘forzando’ a sus pequeños a ayudar a preparar la cena es que aprenderán a apreciar mejor sus esfuerzos culinarios y comer tranquilamente en lugar de hoscas. Esta táctica ha tenido un gran éxito en mi hogar al cocinar para los más pequeños. Espero que también disfrutes el mismo grado de éxito.

Estás buscando formas de hacer que la comida sea más atractiva y divertida para tus pequeños? Aquí tienes algunas recetas creativas y saludables que seguramente despertarán su interés y los animarán a probar nuevos alimentos:

  1. Mini pizzas de vegetales:
    • Ingredientes:
      • Panecillos pequeños de trigo integral
      • Salsa de tomate
      • Queso mozzarella rallado
      • Vegetales variados en rodajas finas (pimientos, champiñones, tomates, etc.)
    • Instrucciones:
      1. Precalienta el horno a 180 °C.
      2. Coloca los panecillos en una bandeja para hornear.
      3. Extiende una capa fina de salsa de tomate sobre cada panecillo.
      4. Espolvorea queso mozzarella rallado sobre la salsa.
      5. Decora con rodajas de vegetales para crear caritas divertidas.
      6. Hornea durante 10-12 minutos o hasta que el queso esté derretido y ligeramente dorado.
  2. Brochetas de frutas:
    • Ingredientes:
      • Trozos de frutas variadas (sandía, melón, uvas, fresas, piña, etc.)
      • Palitos de brocheta
      • Yogur griego o salsa de chocolate para mojar (opcional)
    • Instrucciones:
      1. Ensarta los trozos de fruta en los palitos de brocheta de forma creativa.
      2. Sirve las brochetas tal cual o con un poco de yogur griego o salsa de chocolate para mojar.
  3. Rollitos de tortilla de espinacas y queso:
    • Ingredientes:
      • Tortillas de trigo integral
      • Queso crema bajo en grasa
      • Hojas de espinacas frescas
      • Zanahorias ralladas
    • Instrucciones:
      1. Extiende una capa de queso crema sobre una tortilla.
      2. Coloca hojas de espinacas y zanahorias ralladas encima del queso crema.
      3. Enrolla la tortilla firmemente y córtala en rodajas pequeñas.
      4. Asegura cada rodaja con un palillo de dientes para mantenerla en su lugar.
  4. Smoothie de arcoíris:
    • Ingredientes:
      • Plátano
      • Fresas
      • Mango
      • Kiwi
      • Arándanos
      • Yogur natural
      • Agua o jugo de naranja
    • Instrucciones:
      1. Corta las frutas en trozos pequeños.
      2. En una licuadora, combina los trozos de cada fruta con yogur natural y un poco de agua o jugo de naranja.
      3. Licúa hasta obtener una mezcla suave y homogénea.
      4. Sirve en vasos transparentes en capas de diferentes colores para crear un efecto de arcoíris.

Estas recetas divertidas y saludables harán que la comida sea más emocionante para tus pequeños. ¡Disfruten juntos de preparar y degustar estos deliciosos platos!

Trucos para ocultar vegetales en las comidas de los niños sin que lo noten:

  1. Salsas y purés:
    • Prepara salsas y purés a base de vegetales como zanahorias, calabacines o espinacas y úsalos como base para pastas, pizzas o sándwiches. Los niños disfrutarán de los sabores sin darse cuenta de que están comiendo vegetales.
  2. Batidos y smoothies:
    • Mezcla vegetales como espinacas, col rizada o remolacha en batidos o smoothies con frutas y yogur. El dulzor de las frutas ocultará el sabor de los vegetales, y los niños obtendrán nutrientes adicionales.
  3. Rallados y picados finamente:
    • Ralla o pica finamente los vegetales y agrégalos a platos como hamburguesas, albóndigas o incluso en salsas para pasta. Los vegetales se mezclarán con los demás ingredientes y pasarán desapercibidos.
  4. Pizza de colores:
    • Prepara una pizza con una base de masa de coliflor o masa integral y cubre con salsa de tomate, queso y una variedad de vegetales picados en trozos pequeños. Los colores y sabores se mezclarán con el queso y la salsa, haciendo que los niños disfruten de los vegetales sin darse cuenta.
  5. Espiralizados:
    • Utiliza un espiralizador para convertir vegetales como zanahorias o calabacines en forma de fideos. Mézclalos con pasta convencional o sírvelos como base de platos como stir-fry o ensaladas. Los niños disfrutarán de la textura sin darse cuenta de que están comiendo vegetales.
  6. Panqueques y tortitas:
    • Agrega puré de vegetales como calabaza o batata a la masa de panqueques o tortitas. Los vegetales se mezclarán perfectamente con los demás ingredientes, y los niños obtendrán beneficios adicionales.
  7. Mini empanadas o pastelitos:
    • Rellena mini empanadas o pastelitos con una mezcla de carne y vegetales picados finamente. Los niños disfrutarán de la textura y el sabor sin notar la presencia de los vegetales.
  8. Sopas y cremas:
    • Prepara sopas o cremas con vegetales y luego tritúralos hasta obtener una textura suave. Los niños disfrutarán del sabor sin detectar los trozos de vegetales.

Cómo fomentar una relación saludable con la comida desde temprana edad:

Estos trucos te ayudarán a incorporar vegetales de manera ingeniosa en las comidas de tus hijos, asegurando una alimentación balanceada sin que se den cuenta de que están comiendo vegetales. ¡Anímate a probarlos!

  1. Modela hábitos saludables:
    • Como padre o cuidador, sé un buen modelo a seguir. Muestra interés y disfrute por comer alimentos saludables y variados. Los niños tienden a imitar lo que ven, así que si ven que tú tienes una relación positiva con la comida, es más probable que ellos también la desarrollen.
  2. Ofrece variedad de alimentos:
    • Introduce una amplia variedad de alimentos desde temprana edad. Incluye frutas, verduras, granos integrales, proteínas magras y lácteos bajos en grasa en su dieta diaria. Esto ayudará a que los niños se acostumbren a diferentes sabores y texturas, y a desarrollar una preferencia por alimentos saludables.
  3. Cocina juntos:
    • Involucra a tus hijos en la preparación de las comidas. Permíteles participar en la selección de ingredientes, lavar las frutas y verduras, mezclar ingredientes y ayudar en la cocina. Esto les dará una sensación de propiedad y orgullo por la comida que han ayudado a crear.
  4. Establece horarios regulares de comidas:
    • Crea un horario regular de comidas y meriendas para tus hijos. Esto les ayudará a desarrollar una rutina y a entender la importancia de comer en momentos adecuados. Evita saltar comidas y fomenta el disfrute de cada momento de alimentación.
  5. Enseña sobre la procedencia de los alimentos:
    • Explícales a tus hijos de dónde provienen los alimentos y cómo se cultivan. Visita mercados locales, huertos o incluso cultiva alimentos en casa si es posible. Esto les ayudará a apreciar la naturaleza y a entender el valor de los alimentos frescos y nutritivos.
  6. No utilices la comida como recompensa o castigo:
    • Evita asociar la comida con emociones negativas o positivas. No utilices alimentos como recompensa o castigo, ya que esto puede crear una relación poco saludable con la comida. En su lugar, encuentra otras formas de recompensar y celebrar los logros de tus hijos.
  7. Practica el “prueba un bocado”:
    • Anima a tus hijos a probar al menos un bocado de cada alimento antes de decidir si les gusta o no. Fomenta una actitud abierta hacia nuevos alimentos y evita presionarlos para que coman todo en el plato. Recuerda que cada niño tiene sus propias preferencias y ritmo de aceptación de nuevos alimentos.
  8. Promueve el equilibrio:
    • Enseña a tus hijos sobre la importancia del equilibrio en la alimentación. Explícales que no hay alimentos “buenos” o “malos”, sino que se trata de tener una variedad de opciones saludables en su dieta. Permíteles disfrutar de ocasiones especiales y ocasionalmente alimentos menos saludables, pero dentro de un contexto equilibrado.

Fomentar una relación saludable con la comida desde temprana edad es fundamental para establecer buenos hábitos alimentarios a lo largo de la vida. Sigue estos consejos y ayuda a tus hijos a desarrollar una conexión positiva con los alimentos y a disfrutar de una alimentación saludable.

Snacks saludables para mantener a los niños satisfechos y energizados durante todo el día:

  1. Palitos de vegetales y hummus:
    • Corta zanahorias, apio, pepinos u otros vegetales en palitos y sírvelos con hummus como dip. Los vegetales son ricos en nutrientes y el hummus agrega proteínas y grasas saludables.
  2. Frutas frescas:
    • Ofrece una variedad de frutas frescas, como manzanas, naranjas, uvas, fresas o rodajas de melón. Son opciones saludables, ricas en vitaminas y minerales, y brindan energía natural a los niños.
  3. Yogur y bayas:
    • Sirve yogur natural o griego con una mezcla de bayas como arándanos, frambuesas o moras. Es una combinación deliciosa y nutritiva, rica en proteínas, calcio y antioxidantes.
  4. Batidos de frutas y verduras:
    • Prepara batidos utilizando frutas y verduras como base. Puedes combinar plátano, espinacas, piña, mango o cualquier otra fruta de su elección con leche o yogur. Los batidos son refrescantes y brindan una buena dosis de vitaminas y minerales.
  5. Mezcla de frutos secos y semillas:
    • Crea una mezcla de frutos secos como nueces, almendras, anacardos y semillas como las de calabaza o girasol. Los frutos secos y semillas son una excelente fuente de grasas saludables y proteínas que mantendrán a los niños saciados.
  6. Rollitos de jamón y queso:
    • Enrolla finas lonchas de jamón y queso bajo en grasa para hacer pequeños rollitos. Esta opción ofrece proteínas y calcio, y es fácil de comer como snack.
  7. Barritas de granola caseras:
    • Prepara barritas de granola caseras con ingredientes nutritivos como avena, frutos secos, semillas y miel. Son una alternativa saludable a las barras comerciales, y puedes personalizarlas con los sabores que a tus hijos les gusten.
  8. Palomitas de maíz caseras:
    • Haz palomitas de maíz en casa utilizando granos de maíz sin aditivos artificiales ni exceso de sal o mantequilla. Puedes sazonarlas con hierbas y especias para agregar sabor sin añadir calorías extras.

Recuerda que los snacks saludables son una parte importante de la alimentación de los niños. Estas opciones les brindarán los nutrientes necesarios, los mantendrán satisfechos y les proporcionarán energía durante todo el día.